Al final de este viaje...


He partido tantas veces de tantos sitios que ya debería estar habituada. Pero en esta ocasión es diferente: jamás fue tan triste partir.
Y todo es debido a que esta vez no he tenido la sensación de estar de paso, sino que ha sido...como encontrar un hogar (home, en anglais ;p ).
Así que me gustaría cerrar esta etapa dando las gracias (en remerciant) a los que me han acompañado en mi viaje; a los que compartieron grandes, o pequeños momentos, muchos o pocos, pero que iluminaron mi vida bajo este cielo gris, y que se quedan en un rinconcito de mi corazón de piedra.

Donc, merci à Florence et a Simona pour être comme elles sont, et pour son esprit généreux ; à Silvia, pour me faire sentir depuis le premier jour que je n'étais pas toute seule ; à Clément pour être un magnifique guide amienois; à Mathieu, Bertrand, Olivier, Victor, Brice, et aussi à Patrice (wherever he is), pour me charmer avec son jazz chaque jeudi; à Gérard, pour ses notes, ses mots, et sa belle attitude; à "Patito", pour me faire rire; à Kamel, pour être capable de me regarder et me voir; à Lola, pour sa chaleur innée; à Colette et à Gina pour son affection maternelle; à tous les potes d'Eurodysée, parce que...la langue c'est la langue. Et à tous les autres...

Los prejuicios son horribles; y yo, lo reconozco, soy muy prejuiciosa. Pero tengo que reconocer que con Amiens me he equivocado absolutamente. Quién me iba a decir a mí que me iba a encontar con todo lo que me he encontrado. Quién me iba a decir que iba a sentir calor aquí. Quién me iba a decir que me iba a sentir como en casa.

Me consuela pensar que vuelvo a casa y encuentro a mi gente, pero la verdad es que se me parte el corazón por dejar este lugar y este tiempo atrás. Lo que significa que, al fin y al cabo, lo positivo pesa más que lo negativo, y por eso es tan triste.

Me estoy poniendo tan nostálgica que me estoy dando hasta asco. Así que sólo decir que ya estoy pensando en volver. Donc à la prochaine!
Y al resto...os veo en unos días.

TO BE CONTINUED...

I'm dreaming of a white christmas...


NIEVA! NIEVAAAA!!! NIEVAAAA!!!!!!!!
...

Vale, y ahora que me he calmado (GENTE! NIEVAAAA!!!) ejem! voy a explicaros la película que he vivido estos últimos días.
Yo nunca había visto nevar y mucho menos una ciudad blanca, y en navidad...vaya regalo me he llevado de Amiens...

Siempre hay varias versiones de la misma historia; el jueves (día que yo he bautizado bajo el nombre de "La Primera Nevada de mi Vida Urbana") llegué al trabajo y todo el mundo se quejaba: que si "vaya mierda, que esta mañana en la autopista me ha costado un huevo llegar por la nieve..." que si "no he podido sacar la bici porque con la nieve resbala..." que si "en Trois Cailloux casi me desgracio por el hielo..." y llega Naira con cara de alucinada perdida, en "modo teletubbie" y dice, nada más entrar por la puerta "GENIAL!!! ESTÁ NEVANDO!!!!"... y me miran todos con cara de "esta mujer no está bien del todo...". Pero a mí plim, (yo duermo en Picolín); yo pasé por Trois Cailloux y no me he resbalé, a pesar de que iba dando saltos rollo cuando Heidi encontró a Pedro (qué gran peli de Woody Allen!) y cuando llegué a la catedral, y la vi ahí, blanca, mirándome, como en un cuento de Navidad...casi se me caen dos lágrimas; digo "casi", porque nada más asomar por el lagrimal se convirtieron en hielo, claro.

Como no estoy habituada a la nieve, cada vez que entro a algún sitio cerrado, lo dejo todo perdido, porque no tengo la costumbre de sacudirme la nieve de encima, y pienso que todo el mundo se debe de estar acordando de mi santa madre y allegados, cuando dejo todo un rastro de hielo por la estancia. O a lo mejor sólo piensan que "esta tía no es de aquí" quién sabe. Pero yo estoy tan alucinada, que no me afecta al ánimo.

Vale, y ahora la parte mala de las bajas temperaturas.
Ayer llegamos a menos cinco grados. MENOS CINCO GRADOS! Ha hecho tanto frío que me ha parecido ver pingüinos por la calle. Y casi adopto a uno, si no fuera porque todo es producto de las alucinaciones que me produce el frío, y porque un señor de apellido Claus que vive con un montón de duendes en la casa de al lado me ha dicho que están protegidos. En serio, yo ya no sé si estoy en Amiens o en el puto Polo Norte.
Como iba diciendo, ayer, pasé por Trois Cailloux, que estaba nevado, con el mercado de navidad, y que parecía un cuento...y me encuentro a tres valientes músicos tocando en la calle, con las manos desnudas...Me saludan y me invitan a cantar con ellos, como tantas otras veces, pero esta vez, a la intemperie, con la que está cayendo. Yo, que soy una insensata, digo "sí quiero", y allí viví un tierno y entrañable momento musical, bajo diez capas de ropa (yo llevaba leotardos, dos pares de calcetines, las botas, dos jerseys, dos suéters, la chaqueta, el gorro, la bufanda, los guantes...) y fue para mí tan emocionante que me temblaba la voz. Ah, no, que en realidad era todo el cuerpo. Ah, no, que en realidad no era de emoción, sino porque hace un frió de cuando el grajo vuela bajo. Bueno, fuese como fuera, al rato les dije entre temblores: "Aquí os dejo, mis valientes". Y me pegué una carrera hasta casa porque no me podía creer la gélida sensación que estaba soportando mi cuerpo. Llegué a casa creyendo que tendrían que amputarme los dedos de los pies y la nariz, porque no sentía varios de mis apéndices (y ya sabéis que yo NUNCA exagero). Pero, afortunadamente, sigo entera, gracias.

De todas formas, aún estoy flipada con lo de la nieve, y si no fuera porque me quedan tres días aquí, aún lo estaría celebrando brindando con champán con un muñeco de nieve.
Pero qué despedida climatológica más bonita...temblores aparte.

Tic-tac


15 días exactos me quedan de Amiens. Siempre fui bastante nostálgica, y en momentos como éste, la cosa se empieza a poner emotiva.
Me acuerdo cuando estaba a punto de venirme, que mi madre me dijo en una ocasión "tú te me enamoras y te me quedas allí..." a lo que yo contesté con esa cara que tanto me caracteriza y que a mí me gusta llamar "mi cara de por encima de las circunstancias": "mamá, no flipes, que allí hace mucho frío; yo cuando empiece el invierno me vuelvo a España". Y así va a ser, pero no sin un gran dolor de corazón.
Y sí, me he enamorado, de Amiens. "¿Quién te lo iba a decir a ti, con el frío que hace allí?" me decía Raquel el otro día. Exacto. Nadie. Y me estoy helando...brrrr!!! Pero me he quedado prendada. Ha sido, esta vez, diferente a las otras veces que he estado fuera. Ha sido...intensa. En lo bueno y en lo malo. Pero me da la impresión de haber pasado toda una vida entera. Con lo que reniegan los amienenses que han pasado aquí toda una vida de verdad, que se suben por las paredes...Es gracioso.
Ahora me quedan 15 días rodeada e infectada de conversaciones cargadas de añoranza, de cantos de "cualquier tiempo pasado fue mejor" y miradas románticas llenas de nostalgia. Por eso este tipo de despedidas son tan tristes, y a la vez tan bonitas; un final anunciado, una fecha de caducidad, y el tiempo que corre en tu contra, deprisa, sin darte cuenta. Yo intento aferrarme a cada momento, a cada rincón por el que paso, pensando: "no te olvides que en este bar estabas sentada aquella tarde cuando..." o "enfrente de este escaparate fue cuando recibiste aquella llamada..."o "en esta esquina fue cuando te cruzaste con...", en un intento desesperado de fijarlo todo en mi mente.
Han sido 7 meses largos, cortos, felices, tristes...intensos, como las cosas que te hacen crecer en la vida. Gracias al tiempo que he pasado en Amiens tengo muchas más contradicciones por las reflexiones a causa de las vivencias, muchas menos neuronas a causa de toda la cerveza que he tomado, y mucho menos miedo al frío. Ah, y mucho más cariño por los galos, porque una ciudad no se quiere por lo bonita que pueda ser, por sus calles o sus monumentos, sino por cómo te tratan sus habitantes y lo que vives en ella.

PD: Aquí os dejo un vídeo, de un "bésame mucho" que canté con los All of Swing en el Retroviseur la noche que cené allí con mis padres y mi hermano. Mi padre se vio afectado por lo que se conoce como "el síndrome del padre de la Pantoja" y bueno, he aquí el resultado.No me lo tengáis en cuenta, la tonalidad era mataora. Pero es un vídeo para el recuerdo.

http://www.youtube.com/watch?v=VpziG85dJsA

Lee entre líneas...


Es curioso, ayer tuve la misma conversación tres veces, con tres personas diferentes, y en ningún caso saqué yo el tema. En los tres casos fue con personas de diferentes países: un español, un inglés y un francés. Sí, ya lo sé, parece un chiste de nacionalidades.
La conversación empezaba siempre con la misma pregunta: "eres más anglófila o más francófila?"
Hace unos años, y debido a una serie de catastróficas desdichas en el país de los galos, hubiera dicho sin dudarlo que prefería Inglaterra, rotundamente. Pero con el paso del tiempo, me he dado cuenta de algo: los franceses son chovinistas, claro, pero...no lo somos todos? Yo lo del patriotismo no lo sentí hasta que me fui a trabajar fuera a los 20 años. Y lo siento cada vez que me largo a otro país. Y creo que todos nos tenemos por mucho cuando nos comparamos con otra nación. O no pensamos todos siempre lo mismo? Que si en España hace mejor clima, que si la gente vive mejor, que si allí sí que sabemos divertirnos, que si todo es más barato y no como aquí,...que si t'abuela festeja...! Pues vete a España. Todo tiene su lado bueno y su lado malo, eso está claro.
Pero eso no es lo importante del tema. A lo que voy es a que en todas partes hay gente que mola y gente de una gilipollez supina integral. Y mi modus operandi es quedarme con los primeros, y para los segundos, sean de donde sean, tengo una frase robada pero que ha pasado a formar parte de mi vocabulario habitual: LEE ENTRE LÍNEAS; porque, eso sí, la educación no hay que perderla nunca ;)

Insensatez...


Soy una insensata. Pero me enCANTA. Y vaya juego de palabras más tonto acabo de hacer. Podría borrarlo, no? nada me lo impide...pero mira, el gato es mío y me lo fo...digo...que el blog es mío y pongo lo que quiero. Bueno, al lío:

Últimamente mi vida se está poniendo interesante. ¿Y cómo se llama él?...más bien ella, diría yo: música, se llama música.
La cosa es que poco a poco he ido encontrando un sitio donde me siento como pez en el agua, y es entre músicos, donde la lengua que se habla no es el francés, ni el español, ni el chino mandarín, donde sólo hay un lenguaje y qué más da si vienes de Kazajistán.
Resulta que desde hace unas semanas mi nuevo amigo "el astrólogo" (al que le debo de haber caído en gracia) me llama para hacerme proposiciones muy decentes relacionadas con el mundillo del jazz, y esto a mí me ha dado una vida...
El sábado fue, en cinco palabras: es-pec-ta-cu-lar. Kamel (al que voy a dejar de llamar "el astrólogo" porque ya me sabe mal) me invitó al cumpleaños de una amiga suya donde, según me dijo, iba a haber muchos músicos. Al principio me lo pensé, por aquéllo de verme entre un montón de gente que no conocía de nada...pero luego sopesé: cuáles son las opciones? pues fiesta corriente y moliente por un lado, o soirée musical por el otro...y claro, no había color. Así que allí que me fui, en el coche de la hermana de un tío al que prácticamente no conozco y a una casa donde la cumpleañera acababa de saber de mi existencia, a rodearme de completos desconocidos que hablaban una lengua extraña. Joder qué planazo. Pero...para mi sorpresa, el ambiente resultó ser muy distendido desde el principio. Lola, la cumpleañera me recibió con los brazos abiertos, y además encontré alguna que otra cara conocida (Amiens es, a menudo, muy pequeño).
Y allí estaba yo, mezclándome con la gente, hablando con unos, con otras, y cuando se organizó el colectivo musical, acabé cantando alguna bossa nova (que es un descubrimento que he añadido últimamente a mi repertorio) y algún estándar de jazz. Hasta un Bésame mucho nos marcamos, para dejar bien representada la terreta. Y ya que estaba entre profesionales...pues les cambiaba algún que otro tono para putear un poquito: allí tenía a Kamel y a Mathieu tocando Corcovado con cara de comer limones...luchando con una tonalidad imposible...y saliendo airosos. La verdad es que es una pasada cantar con músicos tan buenos.
Esa noche hubo para todos los gustos: desde rock y blues hasta boleros, pasando por el flamenco; con lo difícil que es...
Una botella de vino blanco rescatada en el último momento 6 euros, un jersey que te enganchas con una puerta 15 euros...ver a un grupo de gabachos tocando flamenco...y tocándolo bien...no tiene precio. Hasta conocí a una francesa que había vivido en Barcelona y que (alerta) me habló en catalán! ...y para todo lo demás, pues Mastercard.

A las 6:30 de la mañana llegaba yo a casa, (en el coche de un bajista que tocaba la guitarra que daba miedo) más feliz que una perdiz. Y a las 11:30 abrí un ojo...y ya no pude volver a dormirme. Yo, la Reina de las Marmotas. Creo que me hago mayor.
Pero qué noche la de aquel día.
El miércoles el astr....digo Kamel ha organizado un concierto de jazz y me ha invitado a cantar con ellos. Así que me parece que este tío es, definitivamente, el contacto que había que hacer en Amiens para moverse en este mundo oscuro y misterioso que es el jazz. Seguramente soy un poco insensata por lanzarme a todas estas cosas con gente que toca tan asquerosamente bien.
Pero que me quiten lo cantao, porque para mí ahora Amiens se ha convertido, sin duda, en otra ciudad distinta.

Poco ruido y muchas nueces.



Este fin de semana ha sido original, a la par que...cuál sería la palabra?...inspirador.

El viernes Silvia, mi compañera de trabajo eslovaca con la que hice muy buenas migas desde el primer día, me invitó a su casa en "la campaña". Vive en un pueblecito de cuatro coma dos habitantes de cuyo nombre no puedo acordarme, dentro de una casita de chocolate que digo yo, con chimenea, con dos pisos , toda de madera y baldosa en el interior, y en la que hay que descalzarse para entrar. La casa está en un terreno con jardín delante y detrás, donde tienen un perro, dos gallinas y dos burros...como en la granja de Playmóbil; pues no me reí yo el día que me dijo que había tenido que madrugar más de la cuenta para ponerle unas gotas a uno de los burros porque tenía conjuntivitis...y la ternura que me entró en el cuerpo cuando los conocí.
Silvia vive con su marido Sébastien y sus dos niños, Charlie de tres años y Gabriel, que debe de tener un añito. El viernes también estaba con ellos una amiga de Sébastien, Constance, que es una enamorada de España y ha vivido en Santiago, Madrid y Barcelona.
En casa de Silvia se respira un algo que me ha dejado atrapada: no sé si será por la calma del campo, o por vivir con dos burros como animales de compañía, o por comer huevos recién puestos todos los días, pero la noche y el día que pasé allí me parecieron mágicos. Desde luego, son una familia que ha conseguido salir de los clichés del mundo actual, de las normas impuestas, y crear un ambiente saludable a todos los niveles, no sé, como de armonía.
Además, comer alimentos "campestres" me ha hecho darme cuenta de lo mal que nos alimentamos en las ciudades, y lo bien que pueden saber las patatas de verdad, los tomates de verdad, y en fin, cualquier alimento que venga directamente de una cooperativa o del huerto del vecino.
Esa noche dormí como hacía años, porque en ése ático, sin un ruido, y sin una luz, era posible el descanso a una profundidad que no recordaba.
Y el sábado por la tarde, jejeje, COGIMOS NUECES! Me recordó a los tiempos en los que iba a recoger la oliva o la almendra con mis abuelos y mis tíos, pero sin darme una paliza de horas, o sea, mucho más práctico. Impresionante, yo, una tía que vive obsesionada con "pisar asfalto"...cogiendo nueces caídas del árbol mientras Charlie se agachaba y decía asombrado "papá mira! aquí hay un montón!".
Hacia las siete de la tarde, cuando estaba a punto de irme, vino la suegra de Silvia con un montón de verduras y ya os podéis imaginar, yo acabé con una bolsa llena hasta arriba de espinacas, tomates, manzanas, remolachas y.....nueces. Son las nueces más ricas que he probado, y no es por la calidad, sino por el romántico sentimiento de pensar que las cogí yo misma, en compañía de unas personas fantásticas.

El sábado llegué a casa y hablé con Clément que me invitó a cenar en casa de sus padres con un montón de amigos suyos. Entre ellos conocí a Pedro, un chileno que está de visita y que me contó las mil y una delicias de Valparaíso. Un tipo interesante este Pedro, me gustó mucho hablar con él. Está claro que chile debe tener algo, porque todo el mundo que va, o se queda, o ya no vuelve a ser el mismo. Como yo, después de recoger nueces caídas de un árbol en plena campaña francesa ;p

PD: por cierto, este viernes salí en la revista del Ayuntamiento de Amiens por casualidad, pero bien enfocada...soy como la San Miguel...donde va triunfa XD
Os dejo el enlace a la foto, fue el sábado pasado, en la noche en blanco. A lo lejos, también se ve una cabeza más alta que las demás...y ése es Clément. jajaja.
Primer pdf. pág 12
http://www.amiens.fr/actus/publications.asp?id=61

Clima "trop picard"


Bueno, cómo deciros esto...creo que la foto y el título son bastante explícitos...

Imaginaos una ciudad en la que miras por la ventana y todo está nublado y piensas "vaya un frío del carajo tiene que estar haciendo fuera, que me voy a chupar los dedos..." Así que te pones varias capas de ropa, un jersey, una chaqueta, el gorro, la bufanda...y cuando sales descubres...que no te equivocabas. Sólo se te ha olvidado un "pequeño" detalle: el paraguas, porque a mitad de camino hacia el trabajo se te pone a llover. Pero piensas "no importa, si los picardos lo consiguen, yo también". Y llegas al trabajo pensando en la sensación tan graciosa que tenías en la calle, cuando sacabas la mano del bolsillo y tenías una curiosa sensación de congelación, pero sólo en la mano. Entras en el despacho y te empiezas a quitar ropa, porque has subido tres pisos corriendo (llegabas tarde) y estás sudando. Pero a los 10 minutos te vuelves a poner la misma ropa porque aún no han encendido la calefacción y te hielas. Después sales a comer, y te pones otra vez chaqueta, bufanda, en fin...y te enteras que esa misma mañana hacía 1 GRADO y por eso se te congelaba la mano (curiosidades de la naturaleza). Vuelves a entrar después de comer y misma operación. Pero a la que sales para irte a casa ya no hace tanto frío...y te quitas la chaqueta. Aunque al ratito empieza a hacer viento, y con cada ráfaga piensas "caguenlamarequeva!" y te pones la chaqueta y te la quitas unas tres veces antes de llegar a la residencia, donde nada más entrar, casi te caes de culo por la masa de calor que casi puedes ver embistiendo contra ti. Y no os quiero decir en la habitación, donde la calefacción están tan alta (yo tengo la mitad de los calefactores apagados) que parece esto el trópico. Así que te vistes de verano; eso o abres la ventana y te quedas con la ropa de invierno, depende del modelito que te apetezca más.
Pues todo eso y mucho más es posible en la Picardie.
Me temo que esto no es más que el principio, porque aún no ha empezado a hacer viento de verdad...ni a llover. No os he contado la teoría de Clément, que dice que "si los niños nacen con un pan debajo del brazo, los picardos nacen con un paraguas". Esto lo dice por lo de la lluvia, que parece que aquí es como el pan nuestro de cada día en invierno, PERO ES QUE YO NO HE VISTO QUE ABRAN LOS PARAGUAS! Mi teoría es otra: las personas se mojan, los picardos son impermeables.
En fin, que si venís por aquí en otoño, acordaos de traer ropa de abrigo,chaqueta, guantes, y tal, pero no os olvideis ni el paraguas ni el bañador. Por si acaso.

Ave fénix


Ayer por la mañana me levanté en un estado como de ensoñación, y no era por el madrugón, sino que me sentía como...si fuera a cambiar algo. Y así fue.

Todo empezó un día que canté con los All of Swing en el Retrovisor, cuando conocí a un tipo bastante curioso que decía ser músico profesional; estuvimos hablando un rato y a mí me pareció una persona bastante rara, (porque entre otras cosas, me preguntó mi signo del zodiaco, y yo no sabía si reirle la gracia o salir corriendo), pero pese a todo le di mi teléfono para que me tuviera informada si había algún acontecimiento musical amienense que mereciera la pena.
Y ayer me llamó para invitarme a una jam session. Así que nos tomamos un café por la tarde y estuvimos hablando un rato (entre otras cosas de mi carta astral, jajaja) y reconozco que me cayó bastante bien: me parece una persona algo excéntrica, pero buen tío, curioso de conocer, desde luego. Resulta que el tipete es el director de una escuela de música de jazz que hay en Amiens y que ha formado a varios de los componentes de los All of Swing (sí, amigos, sí, en Amiens no se puede ser mala porque te pillan siempre).
Total, que por la noche me acerqué a la jam y me encontré con un grupo de bajo, guitarra, congas y voz, (con una cantante fantástica por cierto) que hacían versiones de jazz, bossa, soul, latin jazz, en fin...que yo estaba encantada de la vida. La cantante me propuso un Guantanamera a dúo y al final acabé cantando 4 o 5 temas más...me lo pasé pirata. Cuando miré el reloj eran las 2.15 de la mañana y salí casi disparada de allí (previa entrega de mi carta astral, obsequio de mi nuevo amigo el místico, y renovación de mis chacras y chis gracias a una inspiradora velada).
De camino a casa, miraba las calles de la ciudad y todo era distinto: el olor a lluvia era agradable, la temperatura...ni frío ni calor ( cero grados ) y yo con Indonchine a toda castaña mirando a la luna, que parecía brillar más de lo normal. Me di cuenta de que, por unas horas no me había acordado de esa sensación que me invadía últimamente, ese sentimiento pegajoso de melancolía, o de apatía, más bien. Como si de repente hubiera descubierto que hay vida después del ISAM (que es, en origen, mi "fantástico" lugar de trabajo).
Esta mañana me he levantado hecha un trapo, pero de buen humor. Y hacía no sé cuánto tiempo que no me sentía así. He despertado: NAI'S BACK!!!

Le "petit" Clément


El de la foto es Clément. Y ella es Puppi. Como veis, lo de "petit" es un apelativo exclusivamente cariñoso, porque nada más lejos de la realidad. La verdad, la foto tiene algo de trampa: Puppi es pequeña, pero no tanto...lo que pasa es que Clément es enorme. Mide dos metros y pico, así que no pasa desapercibido. Aunque él dice que viene de París (como todos los niños, no?) es Picardo de la cabeza a los pies, pero hace unos años se fue a Chile y aprendió español, así que ahora habla chileno. Es gracioso escuchar a alguien como Clément hablando con acento chileno... es muy "marrante".

Clément tiene un problema bastante grave que se llama "hipersociabilidad". Si caminas con él por la calle, sea la hora que sea, todo el mundo lo saluda, porque todo el mundo lo conoce, y él saluda a todo el mundo pero...por lo visto no conoce a todo el que saluda, ya que por lo que parece él tiene toda una reputación en Amiens (además de que es imposible olvidar a alguien que mide dos metros de altura y que siempre luce una sonrisa amigable), pero para él es imposible recordar a todo el mundo, claro.

El rollo de Clément es que desde que volvió de Chile se relaciona con los becarios Eurodyssée: los que están a punto de irse presentan a los nuevos a Clément y la cadena continúa así sucesivamente, así que se ha convertido en una especie de nexo entre partidas y partidas de Eurodysées, y nos hace las veces de guía turístico y de gurú espiritual.
Es una persona alegre, con una vida social muy intensa, y seguirle el ritmo a mí se me hace imposible. La última vez que salí de fiesta-fiesta con él yo volvía de un campamento agotador, con vistas a irme a dormir a las 11 de la noche...y volví a casa a las 11 de la mañana. Cuando le dije que era la peor influencia que yo podía encontrar en Amiens respondió: "Muchas gracias!"
Es un tío de lo más simpático, para mí es un poco "la persona" que hay que conocer en Amiens, o más bien "el personaje", porque está hecho un personaje en toda regla. Además, sobra decir que es agradable encontrar a alguien del lugar que se muestra tan predispuesto a conocer a los extranjeros y a integrarlos en ésta, nuestra ciudad de acogida.
Desde el primer día se presentó como alguien que sabe lo que es llegar a un lugar donde no conoces nada ni a nadie, donde además no hablan tu lengua, y con unas costumbres que no son las tuyas. Y para mí ha hecho de Amiens un lugar mucho más amable. Creo que sin Clément esta ciudad sería aún un poco más extraña, un poco más fría. Así que bien se merecía un post!
Ojalá hubiera un Clément en todas las ciudades, porque así la vida de los forasteros sería mucho más fácil y más bella.

Dans mon pays d'Espagne...OLE!


Pero qué bonito es escaparse a casa unos días...sobre todo cuando no lo tenía pensado. Algunos ni os habréis enterado, porque fue un viaje express y bastante improvisado, así que espero que nadie se mosquee, porque hubo gente a la que ni vi, ni avisé.
...Pero qué cuatro días más fantásticos me pasé...lo hice todo:

Comí paella dos días seguidos, me fui de juerga vikinga a ver un concierto de los Mortimer, canté con la Sanford, birreé, con parte de los alligators, almorcé con Carlos, tuve un reencuentro casual de lo más bonito con alguien a quien había echado de menos sin darme cuenta de ello, tomé zumo en el Bla Bla con Frulu y Merigüell, filosofé en el coche con Javi antes de dejarlo en casa (y por filosofar se entiende decir sinsentidos a las 2 de la mañana y enzarzarnos en conversaciones que acaban en un "bah! yo qué sé!"), cené con los colegas del barrio de toda la vida, hasta pude ir a la playa un rato, ah! y un día hasta me emborraché. Lo hice todo! ...no por ese orden, claro; y algunas de estas cosas de forma simultánea. Y además de todo eso, incluso pude pasar algo de tiempo con mis padres y mi hermano en casa.
He de decir, que aunque sólo llevaba 3 meses fuera, yo tenía la impresión de que hubiera pasado un año, porque cuando te vas fuera todo es muy intenso y el tiempo no pasa igual. Además, llegar a un sitio donde hace calor, y todo es juerga y buena vida...AY...! y el clima, peña, el clima, que le cambia a uno la forma de ver las cosas.
También tuve algún que otro momento de crisis, pero en definitiva, lo pasé tan bien, que la vuelta me costó más de una lágrima.
No es que no tuviera ganas de volver (a mí Amiens me gusta, y cuando me vaya de aquí lloraré muchísimo) sino que ahora estoy pasando por un momento algo difícil, sobre todo por el curro. Y sí, ser humana duele, respondiendo a mi propia pregunta de hace dos posts. Pero bueno, vendrán tiempos mejores, teniendo en cuenta que aquí en una semana te cambia la vida 3 veces...
De todas formas, y aunque yo siempre me esté quejando de que me aburro en Valencia y me vaya de acá para allá, (que a veces parezco Wally) creo que es bonito tener un sitio al que vuelves siempre y al que llamas "hogar". Tener siempre esa opción te facilita mucho la vida, la verdad.
Así que bueno, gracias a todos y cada uno de los que pasasteis conmigo, aunque fuera un ratito, porque me ha encantado volver a casa por "Festes Populars".

"Francpañol"


Se dice que no asimilas de verdad un idioma hasta que no sueñas con él, pero mi teoría es muy distinta: yo creo que no asimilas de verdad un idioma hasta que no mezclas palabras de ese idioma cuando estás hablando en tu lengua materna...eso sí que es asimilar una lengua y lo demás son tonterías. ESO SÍ QUE MOLA! y mola tanto, que al final acabas haciéndolo por pura pereza de buscar la palabra en tu idioma, (pensad que aquí nos pasamos el día hablando en francés y utilizando un vocabulario muy concreto en francés), que aunque parece fácil, a veces no lo es tanto, y otras...pasas de todo.
En fin, que una conversación de lo más corriente entre cualquiera de los trabajadores Eurodysées dentro de un par de meses, y llegados a un extremo linguístico pasajero, podría ser, más o menos, algo así:

-Hola, qué tal! Cómo te va el "boulot"?
-Hey! "ça va"? Pues mira, hoy no he currado, así que he "profitado" para comprar en el "match" que no tenía ná pa' "manger".
-"Putain"! Qué suerte, yo hasta las cinco "pile" no salgo. Y encima me viene fatal, porque tengo que pasar por el "foyer" para ver a "Monsieur" Crespel para que me haga el "etat de lieu".
-Jaja!, y eso si lo pillas en el "accueill", que si no...
-Ya, si no vaya putada, que me toca subir a mi "chambre" para volver a bajar a buscarlo. Hablando de mi "chambre"...llevo la "clé"??? Ah sí, es que en este "saco" nunca encuentro nada.
-Aaay, que estás como una "chèvre"! Te acuerdas cuando te olvidaste la "veló"?
-Si, pues anda que tú, que te dejaste un día la llave de la "boite a lettres" "chez" tu colega, y que nunca encuentras el "portable"...
-Bueno, "arreta", "arreta" que no es pa' tanto! Oye, me gusta cómo te has "habillado" hoy!
-Sí, la "gillet" es nueva, pero las "baskets" ya las tenía..."atención" un "voiture"! Es que por aquí pasan "vite-vite", eh? Por cierto, esta noche vamos a "Saint Leu" para la "soirée"?
-No creo, que estoy "fatigué-fatigué" y no estoy para "fêtes"...yo como mucho pasaré a hacerme unas "bieres" por el "centre ville" y au.
-Ooooh..."allé, allé...", que parece que tengas 80 años...
-Que no, que yo esta "nuit" a hacer "dodo".
-Bueno, pues entonces "à demain", no?
-..."shhhe pas"...si nos "rencontramos" "por azar..."
-Pues "rien", "on verrà"...hasta luego..."peut être"!
-"À plus"!

Y ESTO SÍ ES ASIMILAR UN IDIOMA. Y además...MOLA UN MONTÓN...jajajaja.

-Dedicado a mi "cordon-bleu" ;p -

A la follie...



Este mes ha sido una locura:

El mismo día de volver del "Campamento Crusty" Clément me convenció (aunque yo ya estaba en pijama, hecha una piltrafa, y con un parecido bastante peligroso a Amy Winehouse a causa de la fatiga y la mala vida) de salir esa misma noche. Yo no iba a salir, mi idea era acostarme a las 21'00 y dormir 14 horas. Pero dormí 4; las justas para levantarme, darme una ducha y recoger a mis tíos y a mis primos que llegaban de visita. Esa noche, después de pasearlos por Amiens y dejarlos en el hotel, a "alguien" que no voy a nombrar pero que empieza por Lau y acaba por -ra se le ocurrió inventarse que era la noche de las estrellas fugaces y caímos todos como idotas: todos tirados en el parque Saint Pierre como pánfilos mirando al cielo...y nada. La verdad es que nuestra cántabra, si lo que quería era gastarnos una broma, aún debe de estar riéndose. Pero diré en mi defensa que después de 4 horas de sueño y 3 días de acampada, en mi cerebro sólo se oía un extraño "piiiii". Muy triste. Ah sí, y ese fue el día en el que un borracho total pilló a Puppy sin comerlo ni beberlo y le dijo: "Tu padre debe de ser artificiero, porque tú eres una bomba sexual"; No viene a cuento, pero entre lo absurdo de la situación, la cara que puso Puppy, y mi falta de sueño, me reí un buen rato. Total, que esa noche me acosté tarde. Al día siguiente no me levanté tarde, porque tocaba visita turística con la familia (además, me hice les hortillonages en barca remando...con poca ayuda, vamos a decir).
La semana siguiente fue agotadora, y el fin de semana me fui a París para reunirme otra vez con mis tíos y primos; y aprovecho este momento para decir que aborrezco París: es una ciudad preciosa, pero que no funciona, ni p'atrás ni p'alante...AIS!!! Nada más llegar ya me había atascado en el metro por algo que eran incapaces de explicar, a lo mejor porque era un secreto de estado, o porque a Sarkozy se le había escapado el perro-patada que seguro que tiene asegurado en un millón de euros por la red de metro-París. uf! menos mal que por la noche fuimos a cenar a ALBERTO! ALBERTO! para desgracia de mi tía, y el mundo se convirtió para mí (y para dos bichejos que yo me sé) en un sitio más acogedor. El domingo lo pasamos pateando por la ciudad más hostil del mundo, y la semana siguiente otra vez a pelear con pre-adolescentes en una lengua que no es la mía, lo cual es bastante cansado, a la par que frustrante.
Total, así continuó el mes, hasta que volví a irme de acampada 4 días con el curro, donde, por supuesto, también nos llovió, y casi tenemos que evacuar el campamento. El viernes Clément no utilizó sus poderes para ejercer su pésima infuencia sobre mí, (afortunadamente) pero como habían venido Raquel, Mª Amparo y Ana (YUJUUU!!!) pues sólo tuve tiempo de pegarme una ducha y volver a salir de casa. Esa noche volví a ver el rollito de la catedral en color, que la primera vez me impactó mucho, incluso la segunda, pero a la tercera ya me aburrió un poco...y no digamos a la cuarta, en la que me planteé si realmente era bonito o si había sido fruto de mi imaginación. En fin, al día siguiente hicimos un poco de turismo amienense, y el domingo fuimos a Lille, donde presenciamos desde la más agradable reunión de gente en un mercado de proporciones infinitas, hasta vandalismo infantil. Un día muy productivo. Luego volvió a llegar el lunes, y el martes y...uf...yo ya no era persona...era media! Por fin, el fin de semana, pude descansar. Ya sabéis que yo JAMÁS exagero, pero...CASI MUERO DE FATIGA! En un mes he pillado varias infecciones de distintos tipos, me he dormido en un autobús mientras daba cabezadas en un trayecto de 10 minutos, y me he constipado dos veces. Todo culpa de mi ritmo de vida vertiginoso.
Y llegamos a la semana pasada, mi última semana en el CAJ...qué triste es esto: voy a dejar de ser una persona feliz y realizada para convertirme en un ser gris, como el resto de los mortales, con un trabajo gris, en la escuela de comercio de Amiens (gris también). Empiezo mañana. Entenderéis que después de haber conocido la felicidad, esto me tiene algo inquieta. Lo que me lleva a plantearme varias cuestiones: cómo será ser humana? duele? Mañana lo comprobaré.

Son aquellas pequeñas cosas...



Digamos que está decidido: no trabajo, sino que dedico mi tiempo a hacer el pirata. Ya no tengo amigos: todos me odian, porque mi trabajo es LA HOSSTIA...perdón, quién ha dicho eso? he sido yo??? no! yo quería decir LA REPANOCHA!!!

La semana pasada fuimos un día a la bolera (oh, qué rollo) y al siguiente a patinar sobre hielo (yo estaba asqueada, vaya).

Hoy ha tocado ráfting: hora y media de rápidos al compás de La Somme, con chapuzones y triples saltos mortales incluidos. Ya no lo aguanto más. Esto es una tortura....Mañana vamos a un laberinto, y la semana que viene de acampada....es inaguantable verdad?

Cuando no salimos, nos pasamos el rato jugando a cosas...no sé, juegos de mesa o juegos al aire libre que nos enseña mi colega Scout...estoy deprimidísima.

Menos mal que me quedan los pequeños placeres, porque en eso soy como mi padre, y disfruto los pequeños momentos: cada tarde, cuando vuelvo a casa en mi bici Emannuelle, me dejo caer (porque es casi todo descenso) y ahora que hace buen tiempo, me doy un paseo casi sin pedalear; a veces hasta canto por el camino. Recordad que si venís a Amiens y preguntáis por mí, puede que tengáis que preguntar por "la pelirroja majara que canta sobre una bici turquesa". Paso por el parque Saint Pierre, que es un sitio enooorme y lleno de árboles y césped más verdes que un alligator a base de rayos uva, con lago, patos y todo, y a veces me paro a escuchar música y tomar un poco el sol, que así acumulo rayos para el duro invierno. Eso es lo que he hecho hoy. Mi vida es una delicia ...digo...un asco, un asco! ;)

Es el Campamento Krustyyyyy...!






Hace dos semanas, la misma semana en que empecé a trabajar en el CAJ (Centre d'Acueil des Jeunes) en la Maison Pour Tous, TOMA YA! nos fuimos de campamento(Krusty),
Fuimos en bici a Saint Saveur, un pueblo a 9 km de Rivery (empezamos fuerte). Y después de montar tiendas, organizar comidas, y bla, ble, blu....nos arreamos otro viaje en bici para hacer piragüismo y canoé (que no sé cómo se traduce, por cierto).
En cuanto vi el rollito de todos de tirarse a empujones unos a otros al lago me impuse rápidamente de la siguiente manera:
-A ver, yo vengo de un sitio donde hace mucho calor; vosotros no; además sois impermeables, os da igual la lluvia, la humedad, y las adversidades climatológicas; pero a mí no. Yo podría morir a consecuencia de una pulmonía porque en España somos así, de clima cálido. Así que SI'L VOUS PLAÎT, MERCI DE NE PAS ME FAIRE TOMBER DANS L'EAU.
Lo entendieron muy bien mis niños: "Nada de tirar a Naira al agua porque no queremos ser partícipes de una muerte prematura de la monitora".
Fantástico. Eso sí, nos mojamos unos a otros y a mí me tocó también, no podía ser perfecto, que tienen 11 años...
Luego llovío, y nos volvimos a mojar, pero ellos, hala! no sé si os he contado mi teoría de los picardos y su perfecta impermeabilidad. Pero consiste en eso: no se mojan, el agua resbala por sus pieles sin que llegue a calar.
Por la noche nos dieron las uvas para dormir, porque ya se sabe, aunque los monitores ya no tenemos tanta energía, a los preadolescentes les sobra por todos los lados. Quel bazar.
Al día siguiente volvió a llover. Y volvimos al lago a hacer piragüismo y eso llamado canoé, pero esta vez con dos muchachos muy graciosos que nos organizaron unos juegos en el agua, entre ellos el de juntar todas las barquitas y hacernos caminar sobre las puntas por turnos. Y en un momento dado me dice uno: "Ahora te toca a ti, y vas a ir al agua, lo sabes no?" "PERO POR QUÉÉÉÉ???!!!" "Pues obviamente, porque es mucho más divertido tirar a la monitora". Y yo que me había puesto un impermeable para compensar mis deficiencias por no ser picarda y......catástrofe. Al agua que vas. Qué frío...:S Luego pilla la bici, arrea al campamento, y date cuenta de que ya no te quedan pantalones secos. Qué delicia.
Ah sí, y después de hacer un juego de relevos y de que mi equipo perdiera, nos tocó bailar "la dance des canards", que yo no entendía por qué le tenían tanto miedo a ese baile de castigo por haber perdido, y cuando me doy cuenta...estábamos bailando "los pajaritos". Sí amigos, sí, los pajaritos es internacional. Qué humillante, los pajaritos.
Conocimos a un monitor que estaba de acampada con unos franceses pequeños monísimos, que nos comentó su teoría de que "una acampada sin lluvia no es una acampada". Discrepo. Este tío es que es picardo de pura cepa, pero yo opino que una acampada sin sol...no es una acampada ni es nada...es un viaje al país de la húmedad y el constipado. ATCHUM!
Esa noche, como oh! Milagro! no llovió, hicimos una hoguera y jugamos a juegos que nunca funcionaban por falta de concentración y que yo no llegué a entender y todos se rieron a mi costa durante un buen rato porque Naira, la española, no se entera...fue algo frustrante, pero....seco, por lo menos fue seco!
Al día siguiente, después de recoger todo y preparar la comida, otros 9 km en bici hacia Rivery, trayecto accidentadísimo donde tuvimos, entre otras cosas, varias caídas y dos pinchazos.
En fin, que hasta antesdeayer aún me duraba el cansancio, porque desde entonces no he descansado como toca ni un sólo día. Pero, aunque pasada por agua, me lo he pasado pirata.

Total: paseo en bici y pinchar una rueda 5 euros; cargarte una camiseta en un enganchón 10 euros; bailar los pajaritos en francés delante de un montón de niños que antes te respetaban...no tiene precio. Para todo lo demás, Mastercard.

Esos locos bajitos...


Yo era una desgraciada: tenía un curro de mierda, y luego lo dejé, y no tenía trabajo, y mi sueldo era de lo más precario, hasta el punto de que este fin de semana se piró todo el mundo a París y yo me quedé encerrada porque no tenía ni un duro....Y AHORA SOY FELIZ! Mi vida es fantástica; y parezco una esquizofrénica, con tanto cambio de humor...
Lo primero de todo es decir que el Gobierno Francés me ha concedido una ayuda nada desdeñable (teniendo en cuenta mis posibilidades). Lo que me convierte, de momento, en una de las personas más ricas de mi entorno. Y es una gran noticia. Pero eso no es lo que más ha afectado a mi cambio de humor:
El lunes empecé a currar en una asociación, la Maison pour tous (una escuela de verano que funciona todo el año) y donde voy a estar hasta septiembre. Es un sitio donde se respira un ambiente de alegría...AY! (suspiro de enamorada). Ya no soy traductora, soy monitora de criaturas de entre 11 y 14 años...y mi curro mola mucho: mi responsable más directa, Simona, es una chica rumana con una energía agotadora, la adoro; además, me dan de comer, de merendar, y las horas de comida me cuentan como laborables. Ya no trabajo en el centro de Amiens, sino en Rivery, que está a 15 min en bici (y tengo una bici que se llama Emmanuelle, en honor mi francesa más preferida del Planeta Francia), así que me chupo 30 min de bici al día, cosa que disfruto mucho, la verdad.
Monitorear niños es agotador, pero me encanta! Y mira que son ocurrentes...
Ayer hicimos arcilla; vino una "arcillista" a enseñarnos la técnica, y el tema era "animales y sus cuidadores", y ésta fue la conversación entre la tipeta y uno de los "artistas":
-Podéis hacer animales de cualquier tipo, domésticos, salvajes...
-Sí? pues yo voy a hacer a mi profe de mates, que es muy peligrosa.

Y otro flipao que como animal me hace un diplodocus, y le pregunto:
Naira- "Y qué piensas hacer exactamente como cuidador? un cavernícola??
Adrien- "No, un árbol"
Naira- "Euuuu...vale, pero las hojas van a ser un poco difíciles, no?"
Adrien- "qué pasa? no las voy a hacer, porque va a ser un árbol muerto, vale?" .
Sin comentarios.

Hoy hemos ido a la piscina, para que pasaran todos una prueba y les dieran el diploma de que pueden nadar 25 metros porque...nos vamos de acampada! Tíos, esto no es un trabajo, son unas vacaciones. Nos vamos a hacer kayak y piragüismo. Y vamos y volvemos en bici. Esto es un planazo para el verano.
A todo esto...en España no pedimos ni certificado ni leches, verdad? para sacar a los nanos de excursión...aquéllo es un
-"tú sabes nadar?"
-"sí, un poco, bueno, estilo perrito, floto más o menos..."
-"vale, pues vámonos a hacer ráfting!"

Estoy exhausta. Yo tenía tanta energía cuando era una adolescente??? Si nos hemos puesto a ver Billy Elliot y los adultos dábamos cabezadas...y ellos ¡hala! venga a la juerga...me agotan. Así que estoy un poco..."odio los niños!...me encantan los niños!...no, odio los niños!...no, me encantan...!! En fin. Lo normal. Quién me lo iba a decir a mí, yo, de monitora enrollada...Ay! (segundo suspiro de enamorada)Esto sí que es un curro chulo. Contenta :)

Buscando a Tintín.


Cuando era pequeña, mi tía me regaló toda la colección de cómics de Tintín (que por cierto, vaya chasco cuando hace unos años me enteré de que en francés se pronuncia "Tantán"...qué patada en el estómago). Así que lo de ir a Bélgica, la tierra del hombrecillo de los cómics, me hacía mucha ilusión. Así que como el pasado martes que fue 14 de julio, fiesta nacional en Francia, y el lunes había puente, Sandra, Marta y yo nos marcamos una salida de tres pares de narices:
el sábado fuimos a Bologne (en la región de Norte paso de Calais, donde la peli de Bienvenidos al Norte) a casa de Alix, un vecino de la residencia que nos invitó a una fiesta. Hicimos noche allí, y a la mañana siguiente partimos rumbo a la conquista de Bélgica.
Llegamos a Brujas por la tarde (por cierto, curiosa traducción la nuestra, de "Brugges" a "Brujas"...tradutore traitore) y creo que es la ciudad más bonita que he visto junto con Florencia: aquéllo era el "horror vacui", cualquier rincón era digno de mirar. Y hago un inciso: pero cuántos rubios juntos, joer! Qué mareo!
A la mañana siguiente nos subimos a una barca y recorrimos los canales de brujas, pasando bajo los puentes y junto a patos y cisnes que nos sorteaban como acostumbrados, y desde donde, por cierto, vimos la fábrica de Judas (detalle que añado para hacerle los dientes largos a Luis porque soy malvada y me gusta hacer sufrir a mis amigos ;p). Además de visitar varias iglesias, la catedral y cientos de tiendas de chocolate que podían olerse antes de girar la esquina, nos acercamos a ver una "Madonna with child" de Miguel Ángel, que me dejó helada de bonita que es, mecaguenlamarequevá, los pelos de punta, ché. Cinco imágenes se me quedan grabadas de Brujas: fachadas cuadriculadas, calles con olor a chocolate, canales que se pierden a saber dónde, cerveza que vale su peso en oro y la Madonna.
Por la tarde nos marchamos a Gante, y tengo que reconocer que, muy probablemente, ésta ciudad debe de ser bonita, pero la verdad es que verla después de Brujas es una mala idea y a mí no me entusiasmó. Es injusto, pero así lo siento. Eso sí, por la noche nos encontramos con un concierto de folk fantástico, con violín y clarinete solistas; una pasada.
De esta aventura, lo más absurdo fue encontrarme en situaciones en las que nadie me entendía...¡5 lenguas, gente! ¡hablo 5 lenguas, y llegué a encontrarme incomunicada...! Y el flamenco no hay Dios que lo entienda; para mí, es como el chino mandarín, igual me da, porque no se parece a nada, oís? a NA-DA. Fue muy frustrante.
Y aunque a mí los rubios nunca me llamaron la atención, debo decir en honor a la verdad, y no sé si es porque tienen facciones, o semblante, o aspecto diferente, pero yo digo en Bélgica hay gente guapísima. Y sí, al final, encontramos a Tintín :)

Tonerre d'Amiens


Acabo de tener un momento de inspiración: se ha puesto a llover de una forma tremenda, con tormenta eléctrica y todo y yo...me he sentado en la ventana (una ventana considerablemente alta a la que se accede con el complejo sistema de "silla cual escalera") y me he puesto canciones tristes mientras veía los rayos caer. Qué genial. Rayos y centellas por mi ventana cayendo sobre Amiens mientras en mi maravilloso ipod (oh, grandeza de la tecnología) sonaba "blower's daughter" (o lo que es lo mismo, la canción más triste del mundo) y...de pronto me he acordado de Alfonso, con su teoría de que "las canciones tristes aportan mucho más que las alegres"; yo difiero de esa teoría, pero reconozco que ha sido de lo más maravilloso que he hecho últimamente, hasta que me he imaginado que si me viera mi madre me diría "Naira, bájate de ahí, loca-playa, que si te caes te "esnucas"! Sí, mi madre y yo nos comunicamos en un lenguaje muy particular, yo es que hablo 5 idimas y el sexto es "en madre". Pero que me quiten lo bailao!
Ah! y hablando de todo un poco...ya tengo curro, y dos, nada menos (volíes caldo, dos tasses). Empiezo el lunes, pero eso os lo contaré en otra ocasión...

Naira del Arco y los ángeles de Napoleón palito-palito-palito


Este fin de semana ha sido bastante completo:

Filipe se fue a Valenciennes, y Jesús estaba con Pauline en un concierto a cienes y cienes de kilómetros, así que el sábado por la noche nos montamos una “ladies’ night” en toda regla: acabamos en un bar de cuyo nombre no puedo acordarme donde nos identificaron enseguida (se nos debe de ver a la legua) y nos pusieron una rumba detrás de otra. Es algo que España no nos emocionaría ni de coña, pero claro, aquí, el sentido patriótico se despierta muy fácilmente, así que allí nos tenías a todas bailando rumba como enloquecidas. A todo esto, ninguna ni puñetera idea de bailar rumba, pero nos quedamos con el personal, eso es un hecho.

El domingo nos fuimos a Compiegne en el coche de Sandra. Compiegne es un pueblo donde la pobre Gloria pasa sus días aislada de la civilización, pero eso sí, rodeada de naturaleza, con toda la fauna y la flora que ello conlleva. Además, en honor a la verdad, es un pueblo precioso.
Como Gloria, además de vivir allí, trabaja en la oficina de turismo, pues tuvimos una guía de excepción:
Nos llevó a ver el Palacio de Napoleón III con sus correspondientes jardines (que no se privaba de nada el tío), el bosque de Compiegne (que es el segundo más grande de Francia y donde se firmó el armisticio de la primera guerra mundial), un campo de concentración nazi, la iglesia donde rezó Juana de Arco justo antes de que la atraparan y el parque donde la capturaron acto seguido (conclusión: rezar es malo).
Diremos que Juana de Arco es a Compiegne como Julio Verne es a Amiens: lo más importante que ha pasado en toda la historia del lugar y algo que hay que recordar en cada rincón.
Yo tengo mi propia opinión sobre la relación de la Iglesia Católica con Juana de Arco: primero la matan por bruja y luego la hacen santa. O sea, primero te quemamos viva y siglos después te perdonamos porque somos misericordiosos. Muchas gracias.
Y también tengo mi propia teoría sobre sus conversaciones con Dios: por lo que cuenta la historia, ella hablaba con Dios, oía voces y eso, y luego sabía lo que había que hacer en la batalla; no sería esto una suerte (o desgracia) de esquizofrenia que por cierto, no estaba diagnosticada en la “época de antaño”?
En fin, yo soy bastante incrédula para todas estas cosas, más si la Iglesia se mete por medio para contar mentiras cochinas y sacar tajada. Qué pasa, es mi blog y digo lo que quiero!
Pero a pesar de todo, me pareció una excursión fantástica, incluso repetible. Vale la pena darse un paseo por allí. Y gracias Gloria por trabajar en domingo! ;p

20.000 vueltas de viaje amienense alrededor de Julio Verne


Hace un par de semanas APRECA (la empresa responsable de nuestra estancia aquí) nos llevó la casa de Julio Verne, el ciudadano más célebre de Amiens por los siglos de los siglos amén. Lo gracioso es que Julio Verne no nació aquí, sino en Nantes; vivió aquí durante una época y sí, luego murió, como todo hijo de vecino. No obstante, parece que no hubo otro como él sobre suelo amienense, porque aquí toooodo se llama Julio Verne: Museo Julio Verne, Imaginaire Julio Verne, calle Julio Verne....y un largo etcétera. Vamos, que Julio Verne hasta en la sopa. Da la impresión de que fue lo mejor que les pasó: antes de Julio Verne, la nada.
Total, que nos llevan a la que fue la casa de Julio (que está tan presente en nuestras vidas que ya lo tuteamos) y nos recibe una guía francesa muy maja, pero algo acelerada porque su turno terminaba justo después de nuestra visita.
La muchacha nos iba dando datos de lo que fue la morada del célebre escritor, a la par que íbamos adentrándonos en las diferentes estancias...pero conforme avanzábamos nos iba chocando que la guía no paraba de decir “bueno, estamos en una sala que no existía en tiempos de Julio Verne, peeero...”, “ahora estamos en una habitación que nunca perteneció a esta casa, peeero...que reproduce la sala de su editor en París...”, “en fin, este cuarto tampoco es original de la casa de Julio Verne peeero...”. Yo miraba a mis compañeros con cara de pregunta, como diciendo “soy yo que no me estoy enterando? O es que ESTO NO TIENE NADA QUE VER CON JULIO VERNE?!” Hay que ver...y el caso es que es muy bonita, y que la visita guiada está muy bien y todo eso, peeero...

Los Ángeles de Amiens


Tengo que reconocer, que a pesar de haber tenido una semana de mierda en el trabajo (y no voy a hacer más comentarios porque no quiero estropear el post), el fin de semana ha merecido la pena.
Son las fiestas de Amiens, y hay que decir que los picardos de la zona no se lo montan nada mal. La calle se ha llenado de espectáculos que se solapaban unos a otros: teatros, conciertos, performances, actuaciones circenses,...hemos corrido de una parte a otra porque era imposible verlo todo, y no se podía caminar por la calle y no chocar con un espectáculo cada 100 metros, y además todos de una calidad magnífica.
Pero LA MOVIDA (en mayúsculas, digo, LA MOVIDA) pasó ayer por la noche, en la plaza de la estación: vino una compañía marsellesa que se llama La Place des Anges, y que, pese a que habían montado todo un tinglado de cables enormes que iban desde lo alto de la Tour Perret (también llamada "la Torre Perra") hasta el más frío asfalto, y que había sacos y sacos (y más sacos) enormes lleeeenos de plumas blancas, yo no era capaz de imaginarme. Así que nos concentramos con todo Amiens en el bulevar de la estación, y allí empezó algo que supera con creces a lo de la Catedral...de repente empiezan a saltar unos inconscientes personajillos vestidos de blanco impoluto (y con alas) desde lo alto de la torre (que mide....tropocientos metros exactamente, ni uno más ni uno menos) y empiezan a lanzar plumas sobre nuestras cabezas mientras descendían. Había de todo: desde los que saltaban y simplemente aterrizaban dejando un regero de plumas en el aire, hasta los que bajaban con una especie de...cachibache? que los hacía girar entre ellos mientras caían, pasando por una tía que, vestida de bailarina de ballet hacía piruetas en el aire, colgada a su vez de un ángel lanzador de plumas, y por una tipa metida en una especie de crisálida que llevaba encima un zepelín con el que nos sobrevolaba. Todo esto acompañado de una música fantástica, unas luces espectaculares, y todo blanco. Y alas. Por cierto, que dicen que los ángeles no tienen sexo...ja! estos sí que tenían, sí, que con unas mallas blancas tan ajustadas...no hay nada que pueda esconderse ni a 50 metros de altura. Para terminar, como traca final, todos los sacos de plumas que había en tierra, fueron a parar a unos cañones y nos lanzaron kilos de plumas (y creedme, varios kilos de plumas, son muchas plumas) hasta cubrir por completo el cielo...lluvia de plumas!!! y luego se quedaban en el suelo y...guerra de plumas!!! Yo acabé formando equipo con Mireia y defendiéndome de un trío picardo que nos había declarado "la guerre des plumes". Fue fantástico. Sin palabras. ESTO SÍ QUE FUE BELLO...y no la gilipollez esa de la Catedral, que si lucecitas de colores y la leche que les dieron.........quién se acuerda de eso ya?
Si pincháis en el enlace que os dejo arriba, veréis el vídeo de cuando estuvieron en Madrid, y así podréis pensar que eso, exactamente eso (guerra de plumas final incluida en el vídeo) es lo que pasó ayer aquí. No tengo palabras.

Por cierto, se me olvidó comentar que el otro día, en Les Horillonages, Puppi y yo comimos arándanos de un árbol...y me hacía mucha ilusión contarlo. Ya está.
...esto...los arándanos crecen en los árboles?? Bueno, pues entonces no sé qué carajo comimos, pero no nos ha matado, así que fenómeno.

Sobre patos y patosos




El pasado fin de semana el tiempo nos respetó muchísimo y fue fantástico:

El viernes por la noche, Blai, nuestro pastelero de Villalonga, nos hizo para cenar un arroz caldoso que a mí se me saltaban las lágrimas: hay que ver, que me haya tenido que venir yo tan lejos para que alguien de mi tierra me haga un arroz caldoso. No sé si echarme a reir o a llorar.

El sábado fuimos a ver un espectáculo de circo, porque aquí en Amiens, también la peña hace cosas y tal (quiero decir, a parte de echare a llorar porque siempre está lloviendo), y hay una escuela de circo. Había un espectáculo gratuito en un edificio que emulaba una carpa de circo, por la clausura del curso. Y flipamos. Pero hasta niños pequeños colgándose de los sitios más altos, y haciendo las piruetas más inverosímiles. Y una puesta en escena grandísima.

Pero mi día favorito fue el domingo: nos fuimos a Les Hortillonages, que son como unos huertos que hay entre los canales, donde la gente se ha hecho verdaderas casas de campo con jardines que hasta compiten en concursos. Y allí que nos fuimos a pasear, Puppi, Jesús y yo, cuando el murciando dice "Hacemos el paseo en barca?" SÍÍÍÍ!!! pensaba que jamás me lo pediríais. Nos envalentonamos y nos subimos en una barca (no sé ni cómo), y empezamos a remar. El paseo era precioso, entre jardines, mimosas que van a morir al canal, patitos de reunión familiar (ay! me encantan los patos!) y nosotros reeeemen-reeeeemen...y no sólo chocamos unas 6 veces en tres cuartos de hora que tardamos, sino que también nos perdimos 3 veces durante el recorrido, y los guías que pasaban con sus flamantes barcas a motor nos decían "que por ahí no, paletos, no tenéis un mapa?" sí, pero es que el mapa había que ser ingeniero de caminos para descifrarlo! A todo esto, nosotros, sin puñetera idea de remar...yo tenía la impresión de que hasta los patos se nos reían. Fue humillante, a la par que encantador.
Os he dicho alguna vez lo pequeño que es Amiens? que si te cruzas una noche con alguien y tienes un flechazo no te preocupes porque lo volverás a ver sí o sí? que si tienes un encontronazo con alguien no vas a poder evitar a esa persona porque la vas a ver hasta en el súper? Pues yo desembarcando, con el equilibrio natural que me caracteriza....y me encuentro a mi jefa; a mi jefa, a su marido (que trabaja enfrente) y a media familia, que iban a dar un paseo en barca y nos habíamos colado delante por gentileza de los dueños del negocio. Al día siguiente se iban a las Antillas de vacaciones, por eso yo he ido del curro a clase y de clase al curro tantos días. Anda que si llego a saber en el fregado que me estaba metiendo mi jefa...la iba a saludar yo con tanta alegría.
En fin, luego fuimos a buscar a Pauline y a Mireia y nos arreamos a hora y cuarto de coche hasta la playa, para ver el mar. Hacía tanto frío que no estuvimos ni 20 min. Prometido. Aquéllo era el polo. Así que nos fuimos a Saint Valery, un pueblo medieval donde por lo que cuentan atraparon a Juana de Arco.
Llegué a casa a las 23:00, y al día siguiente empezaba sola en el curro, pero valió la pena. Fue un fin de semana genial, aunque ya no puedo mirar igual al Pato Donald, y he sacado una conclusión que me tiene resignada: remo fatal.

Os dejo un vídeo: Naindiana Jones, Puppi y Jesús en Les Hortillonages malditos.

Dios en tecnicolor!


Ayer estaba hecha polvo del fin de semana soleado que he aprovechado hasta la última gota, (pero eso ya os lo contaré mañana) así que no me apetecía nada salir por la noche. Mi plan era quedarme en casa y acostarme pronto. Pero al final me liaron para ir a ver no sé qué historia de luces en la catedral y la leche que les dieron. Total, que llegamos allí a las 22:45 porque la movida empezaba a las 23:00 (claro, si es que hasta que se hace de noche, la cosa no tiene gracia). Nos sentamos en las escaleras de la pintoresca plaza de la catedral, donde ya había un puñado de gente mirando a un par de músicos callejeros (vamos a llamarlos así). Era como si hubiéramos retrocedido varios siglos en el tiempo: una reunión de ciudadanos en la plaza del pueblo, a oscuras, esperando a ver qué pasa, y de repente........no sé si seré capaz de explicarlo con palabras, porque la realidad supera a la ficción: el pórtico de la catedral se ilumina a todo color, pero no en colores y "qué bien, qué bonito, qué alboroto otro perrito piloto", no, ES QUE SE LES VEÍAN HASTA LAS PUPILAS A LOS SANTOS! os juro (aunque no tenga mucha credibilidad que alguien como yo jure nada) que creaban hasta las texturas: los ojos, los trajes, el pelo de las gárgolas. Todo eso acompañado de música coral en estéreo del siglo...de la época de antaño, diremos. Y luego pasaron a iluminar toooda la silueta de la catedral, cada línea, cada sombra, cada pináculo, todo! La movida es que hace años que la catedral estaba ya sucia y de un color oscuro; llena de mierda, vamos. Un buen día el alcalde se levanta queferoso y dice "pues la vamos a limpiar, señores" y los colegas, limpiando, y por casualidad, encuentran policromía bajo la mierda. Policromía que era la original de la edad media. Así que la estudiaron, limpiaron la catedral dejando la piedra desnuda, y montaron el espectáculo este tirando la casa por la ventana, que no quiero ni pensar la de pasta invertida. Mucha. Pero cuántos cálculos matemáticos habrán tenido que hacer para llegar a algo tan bien hecho? Porque está hecho al milímetro. Yo, atea convencida y reconocida, no me extraño nada de que en la edad media se tragaran todo el rollo, ya que no debía de ser para menos. Gente, esto no es bonito, es BELLO, y creo que es la primera vez en mi vida que utilizo esta palabra. Por lo visto dura hasta septiembre, y luego lo repiten en navidad, así que, os lo aseguro, vale la pena venirse unos días para presenciarlo, no habéis visto nada igual. Claro, los amienenses están ya hasta el carajo, porque les llevan tirando el rollo cuatro años, pero allí estábamos unas 50 personas, sentadas en la oscuridad, dejándonos atrapar por algo que no parecía del mundo real. Menos mal que no me quedé en casa...pienso ir a verlo día sí y día no.

Os dejo un vídeo que, la verdad, desmerece muchísimo, pero así os hacéis una pequeñísima idéa de qué va la cosa.
Ah! Y he colgado una foto del tío de madera en el post "el tío de madera", para que veáis por qué tanto alboroto. La cosa tiene tela marinera, nunca mejor dicho.
PRÓXIMA ENTREGA "LES HORTILLONAGES, UNA BARCA, TRES EXTRANJEROS, Y LOS PATOS PENSANDO QUIÉN ES MÁS PATOSO, SI ELLOS O NOSOTROS REMANDO"

Mais attend....QUOI???!!!

Vivo en un tercer piso sin ascensor (obvio) de escaleras antiguas que subo bastantes veces al día, y cada vez que voy a mi cuarto sin parar en el descasillo del segundo, llego con la lengua fuera. Nadie quiere subir a mi habitación porque se cansan; igual que yo. Aquí se camina mucho: todo está "relativamente" cerca, lo que me trae "relativamente" de aquí para allá todo el día. Duermo poco. Cuando no madrugo al día siguiente (y a veces aún así) salgo de marcha. Y encima hoy mi jefa me ha aclarado que no es que se vaya el día 1 de julio de vacaciones; no. SE VA YA!!! El lunes empiezo sola como Kalimero a llevar la empresa. Me ha costado mantener las apariencias, pero mi cara ha debido de ser un poema, mientras decía esto, con mi mejor talante : "mais attend,...quoi?. Todo esto es para explicar por qué después de sólo 15 días en Amiens hoy me he comprado unos pantalones y ya he adelgazado una talla, entre el cansacio físico y el susto. Y para decirle a mi madre que no se preocupe, que aunque voy a volver algo desmejorada en diciembre, que soy feliz...SOY COMO UN GRANO DE CAFÉ! ^^

Son casi las siete de la tarde y llego ahora del curro, desde las 9:30. Estoy muerta. Pero esta noche pienso pegarme una juerga vikinga, ya que llevo toda la semana haciendo doblete entre el curso de francés y el curro. Ya sé extender cheques, contratar traductores, hacer facturas, hacer presupuestos, mediar entre intérpretes y clientes...y conjugar el verbo s'asseoir :S Bueno, más o menos. Me voy a volver loca. Pero da igual, porque...HOY HA HECHO SOL!!! De hecho aún hay sol, porque aquí (dato) anochece a las 23:00. Y amanece a las 5:30. Es de locos o no es de locos??? :)

Por cierto, como estoy hecha una maga de la tecnología os he colgado una fotito de la catedral de Amiens en el post "bienvenida al Norte", que me ha quedado bellísima. A tout a l'heure!

Lucy in the Sky with Diamonds

No llevo aquí ni 15 días y ya me parece que ha pasado una eternidad desde que salí de Valencia. Las dos semanas previas a mi partida (incluidos los últimos 3 días, durante los cuales no dormí más de 10 horas en total y todo me daba vueltas), cuando todo empezaba a acelerarse en mi vida a causa de mi "huida" a tierras galas, parece que fue en otra vida: los últimos ensayos con la Sanford, que me parecían tan fantásticos, los engorrosos trámites burocráticos que hice a toda prisa y a última hora que me produjeron tanta ansiedad, los últimos conciertos a los que fui, que me hacieron vibrar, la cena de despedida con una mezcla de amigos de lo más miscelánea que me hizo plantearme por qué carajo me iba yo de Valencia, mi cuarto patas arriba y yo devanándome los sesos porque no sabía como meter tanta ropa en la maleta, Carlos y Álex en el patio de mi casa a las 2 de la mañana para despedirse de mí, mi padre, mi tío y Jesús en la estación diciéndome adiós con la mano....todo como en un sueño. Nunca ocurrió. Me pasa siempre que me voy de viaje, es como cruzar una puerta, y de pronto, estoy en otra dimensión. Otra vida. Todo pasa muy deprisa cuando salgo fuera, va a toda velocidad, todo es nuevo, y nada parece tener demasiada transcendencia, pero hay momentos en los que frenas en seco, miras por la ventana y piensas ¿pero dónde estaba yo antes de aparecer aquí como por arte de magia? y me acuerdo de mi gente de una forma un poco más real. Para que os hagáis una idea, es como.....como....Lucy in the Sky with Diamonds, todo parece maravilloso, pero de mentira. Como estar en otra realidad. Así me siento siempre que me escapo a otro país y es una de las cosas que más me gustan, porque es como empezar de nuevo, en todos los aspectos.

No vemos un rayo de sol desde ni se sabe cuándo. Hoy he salido del curro y estaba otra vez lloviendo. Y yo aún he sido incapaz de meterme el paraguas en el bolso, así que he hecho una cosa en honor a Marta (la murciana que lleva siempre el efecto "tripi" y a la que todo le parece siempre maravilloso, hasta la lluvia): me he quitado el pañuelo de la cabeza, me he puesto música y he caminado bajo la lluvia, como en un videoclip (sí, he dicho como en un videoclip, qué pasa?). Ha estado bien. Pero ahora tengo que volverme a lavar el pelo...(TONERRE DE BREST!!! que es una expresión que aprendí ayer en clase de francés y que es, ni más ni menos que "rayos y centellas").

El curro bien, gracias. Es complicado, porque tengo que aprender a facturar a los traductores, saber a qué traductores puedo contratar para cada cosa, y además, hacer traducciones. Pero mi jefa me ha dicho que habrá días en los que podré trabajar desde casa, cosa que casi me hace llorar de dicha, ya que en invierno, seguro que hay días en los que me siento tentada de hacerle un monumento a la torre de Babel por diferenciar las lenguas y darnos la oportunidad a los traductores de ejercer nuestra profesión desde la comodidad del hogar.

Por cierto, que como bien ha corroborado Mireia en un post anterior, ayer volvió a suceder: no uno, sino dos machos picardos se lanzaron a las aguas del Somme a poner sendas camisetas al Tío de Madera mientras una multitud gritaba "a poil, a poil!" o lo que en español hubiera sido "en pelooootas, en peloootas!". Total, que una vez allí, los pobres no pudieron negarse, y vaya, que el Tío de Madera debe ser a estas alturas el personaje mejor abrigado de todo Amiens, que no sé ya cuánta ropa lleva encima. Los dos intrépidos nadadores deben de estar, como bien comenta Mireia, muertos de fiebre en la cama, y seguro que ahora disfrutan de 4 enfermedades nuevas, porque el Somme, otra cosa no sé, pero limpio-limpio........y esto lo añado yo.

La fauna amienense I

Hola amigos, soy Naira Rodrigo de la Fuente y hoy os voy a hablar de cómo el Macho Picardo hace acopio de valentía y elegancia, desplegando todo el encanto propio de su sexo, con el fin de cortejar a la hembra y que ésta caiga rendida ante tal festival de asertividad y sex-appeal: esto va un picardo, se te acerca y te dice "Hola, tienes novio?" ¿¿¿¿¡¡¡¡!!!!???? ¡Pero esto es la jungla, gente! Tantos siglos de desarrollo del flirteo en nuestra sociedad y luego llega Amiens y se salta toooodo el protocolo: te asedian por la calle para tomar un café, en el bar para tomar una cerveza, en las cabinas de teléfono para hacer una "llamada a dúo". No digo que esté mal, es un país libre, no? PERO ES QUE SE SALTAN TODA LA CEREMONIA DEL CORTEJO!!! esto es demasiado para mí, en serio, no tienen ninguna gracia estas prácticas; qué maneras!
Y luego están los que, por no ser tan típicos, se pasan de originales: el sábado pasado se me acercó un ciudadano amienense para decirme que iba a venir un amigo suyo a pedirme el pincel que llevaba en el pelo, pero que de ninguna manera, y bajo ningún concepto le dijera que sí (de todos modos, si se pensaba que iba a renunciar a mi pincel mágico, lo llevaba claro). Y así pasó, se quedó sin pincel y sin ligue, porque, por lo que pude imaginar (qué suspicaz, yo) se trataba de algún tipo de apuesta entre amigos...A los 7 pasos, ya en la calle, se nos acerca a Gloria (la Quartera de Poblet) y a mí un personaje al que siempre recordaré como el Tío de la Patata: nos viene el muchacho con una pomme de terre con denominación de origen (Amiens) para vendérnosla por un euro. Nada más y nada menos.
No, aquí no hay término medio: o se pasan de brutos o de originales. Y no veáis yo, las risas que me estoy echando (XD).

El tiempo sigue como una cabra: ayer llovió 3 veces en diez minutos. Y cuando digo llover me refiero a diluviar. Como diría Puppi, nuestra argentina-cordobesa particular: "el tiempo está más ciao que hola".

El "Tío de Madera"


No sé cómo decir esto sin que suene trágico, pero ayer pasó algo dantesco: descolgué la chaqueta de invierno. Sí amigos sí, sabéis? la chaqueta que he llevado toooodo este largo y frío invierno en Valencia; pues aquí anoche, en pleno mes de junio. Y eso no es lo peor: me la puse. Y digo más: la llevé puesta la mayor parte de la noche. Y añado: Y PASÉ FRÍO!!!! Pero qué clima, por favor! Aquí se deben volver majaras de tanto frío todo el año, si es que no tienen un respiro, los picardos! ay! ahora entiendo muchas cosas.....

Pues sí, anoche salí con el clan hispano y con mi chaqueta de invierno a Saint Leu, el barrio "guapo" de Amiens, y la única zona de marcha, por otra parte. Primero invadimos un bar que se llama El Quixote, que tiene coña. Allí terminamos con una conversación de lo más profunda: que si el melón es una fruta, que si es un color, y entonces qué color es? verde? pues no, que es rosa anaranjado, y que si las tías estáis todo el día inventándoos colores, que si burdeos, que si fucsia, que si melón; pues que si los tíos, que no distinguís el blanco del negro. Ja ja, ji ji, pero anoche se dijeron cosas pero que muy fuertes, como lo del color melón. Y lo digo con toda la solemnidad de la que soy capaz, o sea, con mucha.
Después salimos de El Quixote y nos mudamos a otro pub, el Retroviseur, o lo que es lo mismo, el sitio donde pasamos la mayor parte del tiempo de nuestros ratos de ocio. Es un bar donde igual te ponen un día música de los 80 como salsa, y al otro te plantan un conciertazo de jazz en directo que se te caen las bragas al suelo. Perdón por la expresión, pero es que si hubiérais visto el concierto del miércoles (y pasa cada miércoles, por lo visto) lo entenderíais: tres guitarras, un bajo, un acordeón ¡¡¡!!! y un saxo soprano; porque sí, era un saxo soprano, que la peña que si era una flauta, que si un clarinete...al pobre lo transformaron en una noche en el hombre orquesta. Pero todos musicazos, en serio. Im-presionante. Sin duda de lo mejor que he visto en mucho tiempo. He dicho.
Total, que del Retrovisor salimos un rato Laura (la cántabra), Mireia (la barcelonina) y yo (la apátrida) y nos acercamos al río, donde "el Tío de Madera". Y esto merece una pequeña historia:

"El Tío de Madera" es una estatua (de piedra) que hay en medio del río, en honor a un muchacho que vivía en la "época de antaño" en Amiens, cuando el río separaba la ciudad entre el barrio de clase alta y baja. El muchacho, por lo visto, vivía en el barrio pobre, y se enamoró de una chica bien, del otro lado del río, que estaba casada. Cuando se descubrió su historia de amor, el pobre ingenuo le pidió que dejara a su marido y se fuera a vivir con él, pero ella dijo que no podía cruzarse al otro lado (que al chiquita se habría enamorado, pero eso no la convertía en boba); él tampoco podía ir a la otra parte por varias razones, me supongo: no sólo era pobre, sino que el marido vivía allí. Así que el valiente muchacho de clase baja dijo que entonces él se quedaría en medio de las dos zonas esperándola, o lo que es lo mismo, en el río. Y allí sigue. Esperando. Una historia poco original, por otra parte.
Lo que sí es original es lo que viene pasando en los últimos tiempos: por lo que me cuentan, hay una tradición que consiste en graduarse, tirarse al río y ponerle una camiseta al "Tío de Madera". Y gracias a ella, podemos disfrutar de una camiseta diferente cada pocos días. Pero no acaba ahí. También le ponen calzoncillos en la cabeza. Yo no me había planteado cómo lo hacían exactamente hasta anoche, con Laura y Mireia, cuando nos encontramos con una multitud alrededor del río y un tío subiendo a la estatua en calzoncillos tras haber nadado en agua helada. Y yo con mi chaqueta de invierno. El intrépido nativo se subió a los hombros del "Tío de Madera" y se bajó los calzoncillos hasta que los colocó en la cabeza del pobre infeliz tallado en piedra. Y de repente: ovación de los picardos. Esta gente no es normal, en serio.

Bienvenida al Norte


Pues ya estoy aquí! Queda inaugurado este blog, gentileza de Javi Palanca, con foto de Alfonso Calza incluida (no os perdiáis sus fotos en su blog, está hecho un genio de la lámpara).
Dicho esto, paso a mis cosas...

He recibido muchos mails pregutándome qué tal mi llegada a Amiens, así que, aunque podéis seguir escribiéndome cuando queráis, que os contestaré con gusto, yo por mi parte iré contando aquí...lo que me apetezca, que para eso el blog es mío.
Y empiezo por contaros mi primera impresión de Amiens, capital de la Picardie:

Los amienenses (y "picardos"), son gente curiosa: como el clima es tan desagradecido, cuando sale un rayo de sol salen todos a la calle como las setas (perdón por la comparación, pero es que no encuentro otra forma). Sabéis cuando en primavera, en España, decimos que la gente va disfrazada, unos de invierno, otros de verano...? pues me temo que aquí pasa algo así...durante gran parte del año; se ve gente con manga larga, con manga corta, con chaquetas, con tirantes,...todos en la misma plaza tomándose un café al sol, que parece esto el carnaval de Venecia. Es bastante cómico. Eso cuando no hace un frío aterrador, que por lo que me han contado, el invierno pasado llegaron a los 18 grados bajo cero. En noviembre me voy a chupar los dedos.

Yo, por mi parte, me paseo por la ciudad con la chaqueta a cuestas y un suéter en el bolso, por si se complica el día (el otro día granizó ¡granizó! después de un día de calor increíble.), y con esa mirada, como si todo fuera maravilloso, mirándolo todo con ojos de enamorada. En ese estado andaba yo cuando llegué hace exactamente una semana, cargada como Wally (que sólo me faltaba la taza colgando) de cosas imprescindibles que acababa de comprar para sobrevivir a mis primeros días, giro la cabeza a la izquierda, y ahí estaba: la catedral, Notre Dame de Amiens, la más grande de Francia, la segunda más grande de Europa, una enorme obra arquitectónica del gótico flamígero...y...tuve mi primer encontronazo fortuito con un nativo, que con el empanamiento que llevaba encima, choqué contra un francés de bruces. Me lo tengo merecido, por no mirar por dónde ando.

Ya he conocido a casi toda la colonia de latinos que están aquí como yo, con el programa Eurodysée. Está escrito: somo una plaga, y nos agrupamos como tal. Son un grupo de gente que va desde Cantabria hasta Cádiz, pasando por casi todas las provincias de la geografía peninsular, Lisboa y Argentina. Son curiosos: todos muy diferentes entre sí, pero bastante unidos unos a otros, y es que, estar fuera es lo que tiene, te acabas creando una especie de familia alternativa.

De momento, mi vida entre semana se reduce las clases de francés de la mañana a la noche (porque aquí, a las 18:00 se considera ya noche, aunque anochece a las 22:00), pero la semana que viene empiezo a currar, más o menos, porque mi jefa quiere enseñarme cómo funcionan las cosas. Así que voy a ir de acá para allá como los del telepizza. Ya os contaré qué tal.